El Athletic de Bilbao se jugará su presencia en la fase final de la Europa League en Noruega ante el Tromsoe, un conjunto modesto que dio muchos problemas a los rojiblancos en la ida disputada en San Mamés (3-2). Los vizcaínos no pueden permitirse especular con el resultado y eso obliga a Caparrós a salir con todo en la hierba artificial del peculiar estadio de Alfheim, que registrará un lleno para recibir al conjunto vasco. La única duda en el esquema del Athletic es Aitor Ocio, que tiene problemas en una rodilla. El resto parace claro, con Iraizoz en portería, Iraola y Castillo en los laterales, Amorebieta acompañando a Ocio, Javi Martínez y Yeste en el centro, el jóven Muniain y Susaeta en las Bandas con De Marcos, jugador revelación de la pretemporada, y el indispensable Llorente en punta de ataque.
Los bilbaínos ya están avisados del peligro del Tromsoe, que a falta de cinco minutos vencía 1-2 en La Catedral. Los noruegos, mucho más rodados que el conjunto vasco, tienen al alcance de la mano el pase. El técnico Per-Mathias Hoegmo repetirá el mismo once que a punto estuvo de dar la campanada en Bilbao.
El Athletic intentará mejorar su juego en Noruega para no caer eliminado antes de tiempo ante un rival menor después de haberlas pasado canutas en primera ronda con el Young Boys. Su rendimiento en la Supercopa de España ante el Barça tampoco invita al optimismo, pero se espera que la mayor experiencia de los jugadores rojiblancos sirva para solventar un partido con trampa.
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